Año que puntual arribas
con proyectos y deseos
traes júbilo y por ello
siempre eres bienvenido.

Con un parto luminoso
te desperezas al nacer
abres ojos optimistas
deseas dar parabienes.

Te muestras en pañales.
Experimentas tú solo
los instantes que te aguardan
a lo largo de los días.

El abuelo ya se marcha,
pero antes te ha contado
dado muchas instrucciones
con información perpetua.

En tu reciente caminar
te espera un buen recorrido
que se augura algo difícil
es inédito e indeciso.

Cada humano te surfea
de diferente manera
sin embargo la esperanza
la traes con sonrisa clara.

Ciclos donde todo ocurre
con tu singular presencia,
estimulando alegrías,
evitando las tristezas.

María Teresa Rodríguez Cabrera